۶Ƶ

Ciencia y memoria social

Artistas y científicos revisan en FILUNI las experiencias compartidas de los sismos de 1985

Artistas y científicos dialogan sobre los sismos de 1985 en FILUNI
Gerardo Suárez, investigador emérito y profesor del Instituto de Geofísica de la UNAM.
Jaime Campos, sismólogo, profesor titular y director del PRS de la U. de Chile.
"Yo crecí con relatos de terremotos en vez de cuentos infantiles. Mi abuela nos contaba historias del terremoto del año 39. Para el terremoto del 85, eso fue lo primero que recordé”, contó Alejandro Zambra.

Uno de los temas compartidos por y UCHILE es el de Memoria sísmica y ciencia. En ese marco, y como parte del proyecto , la Casa de Bello, a través del (PRS), propició dos conversatorios en FILUNI 2025 en torno a eventos ocurridos en el año 1985: los terremotos de Valparaíso, Chile y Michoacán, México. 

Estos espacios, enmarcados en la campaña nacional e internacional +40 -que se ha extendido durante todo este año- buscaron conmemorar 40 años de políticas de reducción de riesgos de desastres en América Latina.

Nuestra presentación en FILUNI se enmarca en esta campaña donde invitamos a personas de México, ya sean del ámbito científico como personas que conocieron o no estos grandes desastres, para participar de esta reflexión sobre cómo construir territorios más resilientes, cómo podemos habitar territorios presentes y futuros más resilientes en un contexto donde tenemos muchísimas geoamenazas y vulnerabilidades”, dice la especialista del PRS, Juliette Marin.

El primer espacio fue la mesa de diálogo "1985 + 40 años: esta tierra que se mueve. ¿Qué hemos aprendido en torno a los terremotos de México y Chile?", instancia protagonizada por Jaime Campos, sismólogo, profesor titular y director del PRS de la U. de Chile; Sandra Rojas, integrante también del PRS, y Gerardo Suárez, investigador emérito y profesor del Instituto de Geofísica de la UNAM. Este espacio estuvo dedicado a los conocimientos y capacidades que se han obtenido desde el punto de vista de la ciencia, la tecnología y la cultura.  

El profesor Gerardo Suárez se refirió a la importancia de “mirar en perspectiva estos 40 años; todo lo aprendido en términos de instrumentos, educación civil y aprendizajes comparados”. A esto, Jaime Campos complementó con que “las buenas prácticas que se pueden observar en una región, en un territorio, en un país, vale la pena compartirlas con otros colegas para evitar justamente que ese desastre ocurra en esas otras regiones”.

En particular, “la geociencia requiere de compartir esos aprendizajes que no son solamente científicos o de datos, no son solamente instrumentales de las ciencias, sino que tienen que ver también con cultura, tienen que ver con relatos de los pueblos originarios que, además, son súper importantes. Estos relatos permiten una capacidad de reacción frente a la contingencia y dan mucha más capacidad de resolver sin entrar en pánico y complementan el conocimiento occidental que uno levanta y enseña en los colegios”.  

Terremotos en las expresiones culturales

Gerardo Suárez tuvo la particularidad de estar en Chile y en México luego de ambos terremotos. “Creo que quienes vivimos en México y en Chile, países que están en las antípodas de América Latina, pero al mismo tiempo de una cercanía cultural enorme, compartimos la cercanía de los terremotos. Ambos terremotos me marcaron de por vida. Hay mucha literatura al respecto, mucho más de lo que imaginamos”. 

El académico de la ۶Ƶ, Jaime Campos, describió que “los terremotos son un quiebre de la linealidad de la cotidianidad humana. Eso ha impactado en relatos de las tradiciones y mitos de nuestros pueblos”.

Al mismo tiempo, agregó, “aportan resiliencia en las ۶Ƶes cuando se ven enfrentadas a estos eventos”. En relación a cómo quedan plasmados en contenidos culturales, el experto en sismología complementó que “estas interpretaciones culturales, son una oportunidad para mirar qué es lo que no anda bien”.  

En ese sentido, Jaime Campos comentó que “el arte ha podido plasmar por medio de la escritura, la pintura y otras expresiones estos eventos que marcan profundamente a las sociedades. La sismología tiene mucha relación con la música porque en el fondo se trata del estudio de las vibraciones de la tierra”.

Luego, en la misma jornada, se desarrolló la Conferencia "1985 + 40 años de memorias. De Santiago a Ciudad de México, cuando la tierra tiembla y autoras y autores relatan"; cita que reunió a  Juliette Marin del Programa Riesgo Sísmico de la U. de Chile; el escritor y editor mexicano Francisco Hinojosa, y también el escritor chileno Alejandro Zambra.

Este encuentro también fue una oportunidad para reflexionar sobre cómo las memorias sísmicas quedan plasmadas. Alejandro Zambra se refirió a la influencia del terremoto de 1985 en su libro “Formas de volver a casa”. “Yo crecí con relatos de terremotos en vez de cuentos infantiles. Mi abuela nos contaba historias del terremoto del año 39. Para el terremoto del 85, eso fue lo primero que recordé”.

“Por supuesto, como todo chileno ya era más o menos experto en temblores fuertes pero para el terremoto del 85, mi primera sensación fue el vértigo, que al mismo tiempo estaba asociado a la identidad, ‘así que esto es un terremoto’, eso es lo que pensé, sin formularlo en palabras, una sensación y posteriormente fue ese terremoto lo que condujo mi novela”, señaló.

El escritor Francisco Hinojosa, dio cuenta de cómo se viven los sismos desde la idiosincrasia mexicana. “Los mexicanos tenemos un sismógrafo en nuestro ADN que nos hace presentir cuando viene un terremoto. El terremoto del 85 no se sabía qué hacer, a diferencia del año 2017 fue un terremoto donde hubo mucha solidaridad, pero sin duda los terremotos son parte transversal de nuestra cultura”.  

Compartir:
/u231785
Copiar